martes, 5 de agosto de 2014

El enamorado y la muerte .



El enamorado y la muerte .
Un sueño soñaba anoche, 
soñito del alma mía, 
soñaba con mis amores 
que en mis brazos los tenía. 
Vi entrar señora tan blanca 
muy más que la nieve fría. 
-¿Por dónde has entrado, amor? 
¿Cómo has entrado, mi vida? 
Las puertas están cerradas, 
ventanas y celosías. 
- No soy el amor, amante: 
la Muerte que Dios te envía 
- ¡Ay Muerte tan rigurosa, 
déjame vivir un día! 
¡Un día no puede ser, 
una hora tienes de vida! 
 Muy de prisa se calzaba, 
más de prisa se vestía: 
ya se va para la calle, 
en donde su amor vivía. 
- ¡Ábreme la puerta, blanca, 
ábreme la puerta niña! 
- ¿Cómo te podré yo abrir 
si la ocasión no es venida? 
Mi padre no fue al palacio 
mi madre no está dormida. 
- Si no me abres esta noche, 
ya no me abrirás, querida: 
la Muerte me está buscando, 
junto a ti vida sería. 
- Vete bajo la ventana 
donde labraba y cosía, 
te echaré cordón de seda 
para que subas arriba, 
y si el cordón no alcanzare 
mis trenzas añadiría. 
 La fina seda se rompe; 
la Muerte que allí venía: 
- Vamos, el enamorado 
que la hora ya está cumplida. 


Tamy♥ 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario